Hay derechos tan básicos que muchas
veces damos por sentados: nacer con seguridad, que tu madre sobreviva al parto,
recibir atención médica si enfermas…
Pero en Guinea Bissau, esas
garantías siguen siendo un privilegio. Este año, nuestra gala benéfica pone el
foco en la salud materno-infantil, para reducir la mortalidad materna e
infantil, mejorar la salud de las mujeres embarazadas y los bebés, y empoderar
a las mujeres a través de la formación y el acceso a información clara,
comprensible y de calidad.
Porque cada madre tiene derecho a dar a luz con dignidad.
Porque cada bebé merece crecer con salud.
Porque la vida no empieza solo al nacer, sino con una oportunidad
real de futuro